AFPVisual N12

204 AFP Visual Unos días en el pirineo aragonés En el mes de junio de hace 4 años, salíamos del Prat a las 6:40 de la mañana en dirección a Morillo de Tou, un pequeño “pueblo de vacaciones” muy cerca de Ainsa para recorrer aquellos parajes del Pirineo aragonés que hacía muchos años que no visitábamos. Hacía sol y ello nos hacía pensar que el viaje y la estancia de una semana allí empezaban bien. A las cuatro horas llegamos a Morillo de Tou, tomamos posesión de la habitación que teníamos reservada , y para bajar una abundante y excelente comida, nos dirigimos a Aínsa, distante 6 kilómetros, donde nos cayó una tormenta cuando estábamos en el castillo. Mojados pero contentos, regresamos a Morillo. Empleamos el siguiente día para recorrer los alrededores, subiendo al Cerro Cotón con vistas al cercano pantano de Mediano, pasando por un campanario del siglo XII desde donde hay unas vistas espléndidas. Por la tarde visitamos las Gargantas de Escuaín, espectaculares moles de roca, pasando por el pueblo de Puértolas, casi deshabitado todo el año menos en verano, y donde una señora que vivía allí nos explicó que tenía a su padre muy mayor y enfermo. Habían ido a vivir a un pueblo más civilizado pero no se habían podido acostumbrar y habían vuelto. Empleamos el siguiente día en visitar el fantástico Cañón de Añisclo, donde hay una ruta circular que bordea un río, que realizamos y donde hay una ermita excavada en la roca dedicada a San Urbez. Al día siguiente hacemos una escapada a Francia por el túnel de Bielsa y visitamos la Reserve Naturelle de Neouvielle donde se halla el lago Oleron , y subiendo por una carretera llena de curvas se llega al Lac de Long, a más de 2000m. con un paisaje verdaderamente espectacular. Salimos por la mañana temprano para ir a Torla y hacer la excursión a la Cola de Caballo. Llegamos al aparcamiento del parque Nacional de Ordesa y paso a paso empezamos la subida. A medio camino se encuentran las Gradas de Soaso, donde el río se precipita en escalones. Hacemos una pequeña parada para comernos un bocadillo y llegamos a la Cola de caballo, un espectáculo, debajo de las cimas del Mont Perdut y el Sumde Ramond. El tiempo se pone feo y nos volvemos, empleando entre la ida y la vuelta unas 5:30 horas. Fotografies i textos de: Josep Manel Benet Mataix Soci Agrupació Fotogràfica Prat REPORTATGE

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